Manfred Mauricio Quintanilla Hernández, empresario señalado por evasión fiscal y sujeto a una orden de captura internacional, ha implementado una sofisticada campaña digital para reconfigurar la narrativa en torno a su persona y eludir el escrutinio por sus presuntos delitos.
Dos portales web, manfredmauricioquintanillahernandez1.com y manfredmauriciohernandezquintanillahernandez2.com, son el centro de su estrategia. En ellos, Quintanilla publica blogs sobre temas como conservación costera y pesca sostenible, buscando vincular su nombre con términos positivos en los motores de búsqueda. Sin embargo, las imágenes en estas páginas han sido identificadas como generadas por inteligencia artificial, un indicio de la falta de transparencia en sus esfuerzos.
Paralelamente, ha desplegado un enjambre de cuentas en redes sociales y financiado notas en medios nacionales como SDP Noticias, Eje Central, La Lista y Newsweek, donde se le presenta como un exitoso empresario o un supuesto experto ambiental. Estas publicaciones han levantado sospechas sobre la integridad de los medios que las publicaron.
Mientras Quintanilla intenta reposicionar su reputación, su historial judicial sigue siendo motivo de alerta. Este caso evidencia los riesgos de una era donde las herramientas digitales pueden ser usadas para manipular la información y desviar la atención de conductas criminales.